Cosas de dioses y locos griegos
Giannis resurgió volvió al parqué como si nada hubiera pasado. Luis Scola, a sus 41 años, sigue siendo importante para El Alma. Nigeria derrotó a un Estados Unidos colmado de estrellas.
Hola, ¿cómo estás? Bah, qué pregunta. Por lo menos, si sos argentino o argentina y te interpela mínimamente el fútbol, ya sé la respuesta. En De Faja también estamos felices, aun cuando Patty Mills clavó ese triple sobre la bocina que dejó al Alma sin siquiera tiempo suplementario contra Australia.
¿Hay crónica de ese partido? Sí, por supuesto, a cargo de Manuel Giles, el mismo que nos cuenta en esta entrega que Luis Scola, con 41 años, sigue siendo importantísimo para la Selección y que Nigeria hizo historia al derrotar en el amistoso previo a los Juegos Olímpicos a un Estados Unidos colmado de estrellas.
Tranqui, ya sé lo que estás pensando: hay unas finales de NBA en juego. Hace apenas una semana temíamos perdernos a Giannis Antetokounmpo. Bueno, fue todo lo contrario. Cosas de dioses y locos griegos, dice Matías Kletnicki.
Cosas de dioses y locos griegos
Por Matías Kletnicki
Hace una semanas, titulares y suplentes de Milwaukee se llevaron las manos a la cabeza tras presenciar una horrorosa caída de su mejor jugador: Giannis Antetokounmpo. El griego, en plena disputa por el balón, aterrizó de forma trágica sobre su pierna izquierda y, luego de varios minutos en el suelo, debió retirarse de la cancha. El golpe pareció realmente grave. En un año marcado por las lesiones y las ausencias de grandes figuras, se sintió como otro de los tantos capítulos de una temporada desafortunada.
Aun así, el dos veces MVP volvió como nuevo para el primer partido de las finales de la NBA. "Van a forzar su regreso", afirmaban muchos. "Va a estar como Harden en Brooklyn", agregaban otros. Pero Giannis volvió a las canchas como si nada hubiera pasado; como si su pierna nunca se hubiera movido de lugar. "Cosas de dioses y locos griegos", soltó un compañero de la redacción, y no podía estar más acertado.
Tras un primer encuentro flojo, para lo que nos tiene acostumbrados, el nacido en Atenas reencontró su mejor nivel. En el juego 2, pese a que Milwaukee perdió por segundo choque consecutivo, sumó 42 puntos, 12 rebotes, 4 pases de gol y 3 tapones. Verdaderamente, una actuación histórica, la mejor de su carrera... hasta el siguiente partido. En el juego 3, Antetokounmpo emuló sus propios números y se despachó con 41 tantos, 13 rebotes y 6 asistencias, tirando 14/23 en tiros de campo y (ojo) 13/17 desde la línea de libres.
Para empezar, Giannis se unió a selectos clubes estadísticos: es el segundo jugador en la historia de la liga con dobles-dobles de 40 puntos en las finales en partidos consecutivos, uniéndose al gran Shaquille O'Neal (2000) y es el cuarto jugador con más puntos en los primeros tres juegos de unas finales, con un total de 103 tantos. Por otro lado, ya tiene más partidos de 40 puntos en las finales que absolutas leyendas como Kobe Bryant, Kevin Durant, Stephen Curry, Tim Duncan o Kareem Abdul-Jabbar. Y, para ir cerrando estos párrafos de adoración al gigante griego, está promediando 34.3 puntos por encuentro con un 79% de efectividad en la pintura (30/38), la mejor marca de toda su carrera post-temporada.
Con semejante nivel, los de Wisconsin se esperanzan con el milagro. Phoenix está 2-1 arriba en la serie, pero aún falta mucho por jugar. Los Bucks son casi invencibles de locales en estos playoffs (8-1) pero sufren en exceso cuando toca jugar fuera de casa. De todas formas, si Khris Middleton y Jrue Holiday logran estar en la misma sintonía que Giannis, Milwaukee tiene argumentos de sobra para ilusionarse con el segundo anillo de su larga historia.
Luis Scola, como el buen vino
Por Manuel Giles
Argentina cayó por 87 a 84 frente a Australia en su primera presentación pensando en los Juegos Olímpicos de Tokio 2021. La Selección dejó una buena sensación, sobre todo teniendo en cuenta que pasaron casi dos años desde la última vez que disputó un partido y con varios de sus jugadores aún poniéndose al 100%. Entre los rostros nuevos (como Leandro Bolmaro, que tuvo un más que positivo debut) y algunos ya conocidos (Facu Campazzo o Luca Vildoza y sus grandes aportes ofensivos) destacó uno que ya es historia pura: Luis Scola.
“41 años no son nada”, parece decir Luifa cada vez que juega. Su vigencia es sencillamente espectacular: sigue siendo ese dolor de cabeza para las defensas rivales y cada vez suma más recursos a su repertorio. A sus habilidades en el poste bajo le suma un tiro exterior que está cada vez mejor (en el cotejo firmó un 4-9 en triples). Fue el máximo anotador con 25 puntos junto con 8 rebotes y una de las razones por las que la albiceleste estuvo cerca de empatar sobre el final. Como el buen vino: cuanto más viejo, mejor.
Más de 20 años lleva ya con la Mayor, con presencias en ocasiones históricas como el oro olímpico en Atenas 2004 o el bronce en Beijing 2008. Miembro pilar de la Generación Dorada, Scola ya anticipó que el compromiso en la tierra del sol naciente será el punto final de su extensa y laureada carrera.
“No hay camino fácil hacia la medalla”, declaró hace algunos días. Y por supuesto que no: Argentina compartirá grupo con España (último campeón mundial), Eslovenia (que tiene a un Luka Doncic intratable en la actualidad) y Japón (anfitrión de la competición). Sin dudas, no será fácil. Pero con verlo jugar y ser líder de un grupo de jugadores que tienen tanta hambre de gloria no podemos, al menos, ilusionarnos con alcanzar la gloria una vez más.
Una sorpresa histórica a domicilio
Por Manuel Giles
El sábado por la noche, la atención del público argentino estaba volcada en su totalidad a la obtención de la Copa América frente a Brasil en el Estadio Maracaná. Para los seguidores del básquet, la previa era perfecta para disfrutar del primer amistoso de preparación de la Selección albiceleste frente a Australia, un duelo que finalmente los boomers se llevarían por 87 a 84 con un game-winner de Patty Mills. Pero, mientras tanto, un partido histórico se jugó en Las Vegas: Nigeria venció por 90 a 87 a Estados Unidos.
La noticia era impactante. ¿El Team USA, con todas sus figuras estelares, varios All-Star y All-NBA, derrotado frente a un combinado mucho más humilde? Suena loco, pero fue así. Los dirigidos por Mike Brown pisaron fuerte, lastimaron desde el perímetro (convirtieron 20 triples contra los 10 de su rival) e hicieron un gran trabajo defendiendo a estrellas como Kevin Durant, que finalizó con apenas 17 puntos. Mostraron un esquema muy fuerte y trabajado, diametralmente distinto al de años atrás y se plantan como una de las posibles sorpresas de cara a Tokio 2021.
Tal vez los números puedan dar un mejor contexto a esta gran victoria: los últimos dos cruces entre Nigeria y los Estados Unidos fueron ambos para los norteamericanos, quienes sacaron una diferencia de 127 tantos entre las dos presentaciones. La más recordada es aquel triunfo en Londres 2012 con una demoledora paliza por 156 a 73. ¿Algunos nombres de aquel conjunto? LeBron James, Kevin Durant, Kobe Bryant y Carmelo Anthony. Nada fácil. Además, el Team USA llevaba un récord de 54-2 en amistosos desde que los jugadores de la liga comenzaron a ser convocados (en 1992) y de 39-0 en sus últimas tres campañas de Juegos Olímpicos.
Una curiosidad del plantel africano: muchos de sus jugadores (11, para ser precisos) nacieron y se criaron en los EEUU, mientras que 7 de ellos juegan en la NBA: KZ Okpala, Precious Achiuwa, Gabe Vincent (todos en Miami Heat), Josh Okogie (Minnesota Timberwolves), Chimezie Metu (Sacramento Kings), Miye Oni (Utah Jazz) y Jahil Okafor (Detroit Pistons). Un caso muy similar al de Puerto Rico, que posee varios jugadores que forman parte del seleccionado y que nacieron en suelo norteamericano aunque su ascendencia les permite disputar partidos con el país de origen de sus padres. Este tweet de Ricardo Scazzino detalla en profundidad la información de la formación profesional de los representantes nigerianos.
Cuando estés leyendo esto, Nigeria estará enfrentando ni más ni menos que a la Argentina (17:30 en hora local, sin televisación). Será una prueba fundamental para los dirigidos por Sergio ‘Oveja’ Hernández para medirse frente a un equipo con experiencia y que promete ser una de las sorpresas en los JJOO que se vienen.
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En el último episodio de De Faja Podcast, charlamos con Homero, quizás más conocido como Phoenix Suns Argentina y la charla fue muy linda. Desde ya, recomendable. La encontrás acá.
Antes te dijimos que el partido de Argentina contra Nigeria no iba a ser televisado, peeeeeero, si todavía no encontraste algún stream de dudosa procedencia que funcione bien cuando estás leyendo esto, quizás podemos darte una mano si nos mandás un mensaje por Twitter.
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Abrazo y que tengas una muy buena semana.
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